jueves, 5 de abril de 2012

Menuda torrija

torrija

  1. f. Rebanada de pan rebozada en huevo, empapada en vino o leche, frita y endulzada con azúcar y canela o almíbar:
    las torrijas son un dulce típico de la Semana Santa castellana.
  2. col. Borrachera:
    ¡menuda torrija me agarré en el chino!
Inmersos ya en la Semana Santa, y caminando hacia la renovación del espíritu (Cristo resu resi, canto religioso con un canon sublime que canté una Semana Santa del año 82, en un retiro espiritual con las Adoratrices de Guadalajara, allá por mi etapa de residente en colegios menores de religiosas), dejo para deleite de mis seguidores y cualquiera que pasare por aquí (unos seite u ocho tirando por lo alto, aunque los elegidos siempre son minoría), la tradicional receta de las torrijas, a las que he añadido un toque especial, más por accidente que por iniciativa, ya que se me olvidó comprar la canela y, echando mano de los condimentos disponibles, en el fondo del armarito encontré unos anises y pensé que podría resultar. 

A falta de pan de Eulogio, panadero de mi pueblo fallecido hace tiempo, pero cuyo negocio sigue siendo el de la familia (ahora el panadero es Eulogín y demás miembros del clan familiar, que continúan elaborando pan, galletas, magdalenas, roquillas, tortas y algún otro etcétera de manera tradicional, y repartiéndolo directamente por las tiendas y aldeillas adyacentes (El Charco, Ballesteros, Los Quiles, La Cruz de Piedra...) con su furgoneta, cobrando lo que estima conveniente por su trabajo y sus madrugones para que sus vecinos tengan pan del día bien tempranito, siendo sus productos después vendidos por el pequeño comerciante a un precido equitativo y razonable sin necesidad de ser inflado por más intermediarios que panadero y tendero, lo que supune calidad y ahorro para el consumidor... Puffff, me perdí en reivindicaciones de antiguas mercaderías... A ver, retomo el inicial A falta de pan y continúo con buenas son estas torrijas que Mercadona nos da  listas para preparar.

Sin más dilación procedo a exponer.
Ingredientes:
- Pan para torrijas
- Leche
- Huevos
- Azúcar
- Anis
- Una cucharada pequeña de miel

Técnica:
Sumergimos la rebanada de pan en leche a la que hemos añadido un poco de azúcar, una cucharada pequeña de miel y unos anises machacados. La dejamos un tiempo prudencial (los imprudentes las dejarán resecas o tan empachadas en leche que corran el riesgo de romperse al rebozar en el huevo). Las rebozamos en el huevo batido (muy bien batido siempre que sea para tortilla y rebozados, secreto de una tortilla jugosa y de un rebozado uniforme).


Las frímos en abundante aceite de oliva (importante que el aceite esté bien caliente, si no, se empacharán mientras toma la temperatura adecuada, pretendemos dorarlas no empacharlas). Las extraemos y dejamos enfriar y escurrir en un plato con papel secante.


Procedemos al último paso que es rebozar en azúcar con revuelto de un majado de anises. Et voilà


El sabor y aroma que les ha dado el anís las hacen  irresistibles.

9 comentarios:

  1. Muy inspirada la introducción, jajaja, bravo.

    pero oye, no habia que hacer un perolo con leche y canela y bañarlas ahí como unas cuentas horas? o es lo q dices al principio y ya?

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  2. Creo que si haces eso que dices te saldrá puré de miga de pan. Lo he escrito tal cual las he ido haciendo y te aseguro que el resultado es guay.

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  3. Ponemos a hervir la leche junto a la cáscara de naranja y limón, la ramita de canela y la vaina de vainilla, de la que habremos extraido las semillas para dar más sabor. También incluimos el azúcar y el licor. Cuando rompa a hervir, apartamos del fuego y dejamos infusionar 10 minutos.

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  4. http://pepacooks.com/2011/03/torrijas-tradicionales-semana-santa-recet/

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  5. Aquí el secreto está en la leche, está claro, en los sabores que le quieras dar. Mi manera es en frío: a la leche fría, sin necesidad de hervir, como mucho calentar para diluir mejor el azúcar y la miel, le añades los anises machacados y remueves. Puedes dejar reposar para que coja el sabor.

    Si a la leche le añades la canela la echas en rama y vaina de vainilla, eso tiene que cocer para soltar sabor. Es más laborioso pero igualmente válido, y el resultado también parece qu tiene que ser muy apetecible.

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  6. cuánto es un tiempo "prudencial"? 5 mns? Una hora??

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  7. He podido comprobar que el tiempo prudencial tambien depende del pan, por ejemplo, el pa de chapata se esponja rapidísimo y como no lo saque ipso facto se rompe con facilidad. El pan común, el elaborado tradicionalmente precisa de más tiempo, a lo sumo un par de minutos, nada de dejar el pan reposando horas. En definitiva, eso se aprecia y, cuando se estima oportuno que el pan se ha empapado como debise, se extrae y se pasa al huevo.

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  8. Yo a la leche no le echo nada. Y en vez de anises, canela.

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